#ElPerúQueQueremos

Parto en casa.

Publicado: 2011-10-04

Yo, del tema, realmente no puedo opinar. He leído y oído bastante pero jamás lo he vivido. Quisiera, ¡claro que sí! Siento que sería genial y tan natural -después de haber cubierto todo lo básico- dar a luz en casa. Pero aquí OJO, un parto natural no es un parto normal. Mejor que nos explique la experta Angela Brocker. Ella es doctora y defensora del parto natural, en casa y en el agua. Es dueña y promotora de la "Casa de nacimiento Pakarii" (Miraflores) y aquí les paso un extractora de una entrevista que le hicieron en El Comercio.

¿Por qué decidió hacer una casa de nacimiento?

Tiene que ver con un cambio en la sociedad. Creo que nuestros hijos pueden hacer las cosas mejor que nosotros. Ellos son el futuro. Y es durante el embarazo en que los padres tienen las antenas paradas para escuchar. Pueden entender que los niños son el futuro y hay que ayudarlos a crecer bien. La idea es trabajar con la pareja que espera un hijo, acompañarla durante el primer año del niño, que es el cimiento de la crianza, y darle la oportunidad de tener un buen parto.

¿Que haya un parto natural implica que hay un parto artificial?

Así es. En las clínicas no se dan partos naturales, aunque sean vaginales. No es natural desde que no se le da libertad a la mujer de elegir la posición de parto. Les rasuran el vello púbico, le ponen suero, enema, una cantidad de cosas. Si les das a escoger, las mujeres eligen una posición vertical: sentada, parada, en cuclillas, porque la gravedad es el aliado número uno en un parto. Existen estudios científicos que demuestran que el parto en casa es una buena opción para una mujer que se siente segura, que tiene una pareja o una familia que la apoyan en su decisión. Ella debe tener una contención emocional y psicológica y un profesional presente.

¿Esta visión está en contra de las clínicas?

No estamos en contra de nada ni nadie. Defendemos el parto natural porque en el mundo occidental no se sabe que esto implica volver a un estilo de vida natural.

¿Qué es una experiencia límite?

Es la experiencia del dolor. Todo el mundo le tiene miedo. El dolor de parto no tiene que ver con Eva y Adán. Eso ya pasó a la historia. Vivimos en la sociedad de la aspirina y no queremos sentir dolor. Este no está hecho para jodernos la vida, sino para que digamos: (si me duele) tengo una herida, debo cuidarla para que se sane. El parto está hecho para eso, si no tuviéramos dolor de parto daríamos a luz en cualquier lugar. Cruzando la calle se nos caería el hijo. Las hembras del mundo animal tienen dolor de parto e instinto maternal. Cuando les toca el parto, van a donde tienen que ir, paren, crían a sus hijos y ya. El dolor de parto tiene un sentido y se puede lidiar con él. Ningún dolor es la muerte, pero la sensación de las mujeres de la ciudad de lidiar con este es muy fuerte, por eso es una experiencia límite.

Más allá de lo que nos cuenta Angela tengo, de primera mano, la experiencia de mi buena amiga Nuria. Ella dio a luz a sus dos hijos en su casa, es psicóloga, una mujer muy inteligente y conectada con su instinto. En una entrevista que le hicieron hace poco acerca del tema, ella comenta: "Un parto en casa no es para todas, pero para nosotros, fue la experiencia más hermosa que pudimos tener". Nu -como yo la llamo- es inspiradora, tiene la fuerza de un roble y es la vez un mujer muy dulce, absolutamente expresiva, una grandiosa amiga.

Aquí podrás conocer cómo fue su segundo parto y aquí les paso entrevista que le hicieron:

Si tuvieras toda la información necesaria y habiendo cubierto el tema de seguridad para ti y tu bebé, ¿darías a luz en casa?

Hablamos,

Lu.

La Casa de Nacimiento Pakarii queda en Av. Petit Thouars 4534, Miraflores.


Escrito por

Lu

Lucero. Mamá, psicóloga, terca, terca, embobada por las hijas. Aún no llego a los 30, aún me falta el libro y el árbol, pero ya tengo la web. Mamá de DOS chancletas es un espacio en el que escribo sobre el desarrollo y crecimiento de mis dos hijas. Empezó c


Publicado en

Mamá de DOS chancletas

Ana no duerme, Ale no deja dormir